Dioses a la medida

Dioses a la medida

Centro y Sur América fueron conquistadas en nombre del dios de los reyes españoles; cuando los conquistadores enseñaron la Biblia a Atahualpa le aseguraron que dicho libro era la palabra de dios, el rey nativo puso el libro en su oreja y al no escuchar palabra alguna lo arrojó al suelo, este fue un buen pretexto para secuestrarlo y pedir un millonario rescate en metales y piedras preciosas a cambio de su vida, pero una vez que los secuestradores tenían los tesoros requeridos no cumplieron su palabra y asesinaron al ilustre rehén en el nombre de un dios ávido de oro y gemas.

En Francia el Pueblo se cansó de vivir en la miseria mientras el Rey y sus amigos, a quienes llamaba cortesanos, vivían con lujos excesivos, por lo que organizaron una revolución que fue liderada por Maximiliano Robespierre, este caudillo instauró la Asamblea Nacional con la que dio inicio a la Nueva República, pero una vez que se consolidó en el poder empezó a ver enemigos en todas partes, y ejecutó a muchos de sus aliados, tanta sangre regó que a este periodo de gobierno se lo conoce como “el reinado del terror”, finalmente este caudillo fue ejecutado por el Pueblo que se cansó de haber pasado de un Rey a un Tirano. Posteriormente apareció otro “Salvador del Pueblo” que terminó coronándose como el Emperador Napoleón Bonaparte.

La revolución socialista nació como un movimiento político para reivindicar los derechos de los obreros y los agricultores, por esto encontramos en su bandera un martillo y una hoz; las dos grandes revoluciones socialistas costaron la vida de unas 100 millones de personas, creo que por esto su bandera es de color rojo; pero después de décadas de vigencia no cumplieron con su promesa a los millones de personas que sobrevivieron; actualmente se oferta en el mercado laboral capitalista mano de obra barata de obreros socialistas chinos; para el gobierno cubano el trabajo del pueblo es una mercancía que la comercializa y se queda con la mayoría de la ganancia.

En los países con regímenes socialistas no se permite la libre expresión de ideas diferentes a las oficiales, en este campo aún están en la edad del oscurantismo. 

También fue abolido el culto a los dioses tradicionales, pero se reeditó un culto que se había practicado antiguamente, esto es, el culto al caudillo, con lo que el socialismo se transformó en una nueva religión en la que el temor ya no es a algún dios sino al Estado que está representado únicamente por el caudillo.

En el régimen nacionalsocialista alemán, el culto y temor a Adolfo Hitler lo llevaron a la máxima expresión; el Pueblo se tornó en obediente por temor o porque esperaban que Hitler resuelva todos sus problemas.

Muchas personas, actualmente ven a Hitler como un gran líder porque construyó carreteras magnificas y pasan por alto el atropello a los derechos humanos de millones de personas.

La frase del rey francés Luis XIV “El Estado soy yo” resume el credo de los caudillos de los países que llevamos más de doscientos años en vías de desarrollo.

En estos países el caudillo llega al poder mediante elecciones e inmediatamente se apodera de todas las instituciones del Estado, incluidos el Legislativo, el Judicial y la Institución que organiza las elecciones, entonces las demás elecciones invariablemente las “ganará”. Para lograrlo se gana el respaldo de las Fuerzas Armadas.

Siempre ha pasado que el caudillo se convierte en una persona millonaria, tanto que su nombre y los de los cortesanos, aparecerán en las revistas de los magnates del planeta, pero la mayoría de las personas seguirán viviendo en la pobreza.

El culto al caudillo realmente es una religión, y para que pueda crecer es necesario eliminar a la competencia, esta religión también se basa en los dogmas que con regularidad emite.

Todos los caudillos instauran “democracias depredadoras”.

Explico este término con un ejemplo: En las sabanas africanas, cuando el león dominante es desplazado de la manada por un león joven, el defenestrado realmente lo pierde todo, y el nuevo león dominante se apodera de todo, inclusive asesina a los hijos del desplazado para que la manada se forme solamente con sus hijos.

En la democracia depredadora la función Legislativa “legaliza” todos los actos que el caudillo ordena a sus legisladores, y si algún acto es inconstitucional reforman la Constitución, este tipo de democracia se basa en el sofisma “quien gana las elecciones manda” por lo que desaparece la separación de poderes.

Los habitantes de naciones con democracias depredadoras viven alejados del Buen Vivir porque las condiciones de salud pública, educación, económica, etc., son precarias.

Las democracias depredadoras existirán mientras el caudillo cuente con el respaldo de las Fuerzas Armadas.

Las naciones con regímenes con democracias en constante evolución, donde las diferentes funciones del Estado son administradas de manera separada y sin la injerencia del caudillo han progresado.

El estribillo de una canción popularizada por el boricua Héctor Lavoe resume la filosofía de las revoluciones lideradas por caudillos depredadores “Quítate tú pa’ ponerme yo”.