domingo, 29 de noviembre de 2015

La ley divina (1)

La ley divina (1)


El Universo está organizado por Principios que rigen a todas las substancias que lo conforman, y sin importar su nivel evolutivo nadie escapa de su dominio, además su influencia es constante y no por ratitos, por lo que todos los acontecimientos ocurren por una causa previa.

A los Principios Universales también se los conocen como Leyes Divinas.

Está aceptado por la comunidad científica que todas las substancias del Universo están formadas por partículas elementales que están en constante vibración, y son las que forman los distintos tipos de átomos.

Las diversas sustancias se diferencian unas de otras por sus propiedades físicas y químicas, y esto es causado por el grado de vibración de dichas partículas elementales que es lo que provoca las diversas maneras en que se agrupan; este es el fundamento de la Física Cuántica desde hace unos 100 años, y de la Escuela Hermética desde hace más de cinco mil años.

Substancia o sustancia es toda porción de materia o energía con determinadas propiedades intrínsecas a su naturaleza. Son substancias el aire, la tierra, el fuego, el agua, los animales, las plantas, las estrellas, la luz, los átomos, las personas, las piedras, etc.

Las emociones, los sentimientos y los pensamientos son efectos generados por las substancias de acuerdo al nivel de vibración de sus partículas primarias, esto es de acuerdo a su nivel evolutivo.

El filósofo griego Demócrito, nacido el año 460 AC, propuso que toda la materia del Universo resulta de la combinación de ciertas substancias básicas a las que llamó átomos, que significa “que no puede cortarse”. A los átomos  les atribuyó las siguientes cualidades: Inmutables porque no se pueden alterar. Imperceptibles para los sentidos. Eternos. Infinitamente pequeños. Las distintas formas de la materia dependen de la manera en que estén agrupados.

La humanidad tuvo que esperar hasta el año 1900, para que el físico alemán Max Planck, a los 42 años de edad, demuestre matemáticamente que Demócrito tenía razón, cuando al fundar la Física Cuántica presentó una teoría que explica que la energía fluye de manera discontinua, en paquetes uniformes que son múltiplos de una unidad básica muy pequeña a la que llamó quantum.

Esta teoría fue revolucionaria pues antes de 1900 se creía que la energía fluía de manera continua. La electricidad es una forma de energía producto del movimiento de los electrones que saltan de un átomo a otro.

Planck también postuló que no se puede conocer al mismo tiempo la posición y la velocidad de una partícula, porque cualquier intento de medida produce una absorción o emisión de energía y hace que varíe el resultado. Esto lo llevó a proponer que la naturaleza no tiene cualidad determinista, porque una misma Causa tendría Efectos diferentes.

El Determinismo es una doctrina filosófica y científica que postula que todos los acontecimientos en el Universo ocurren por la acción de leyes universales causales, esto es que todo es resultado de una causa previa; por lo tanto las cosas no ocurren al azar.

La propuesta de Planck aparentemente contradice lo dicho en el primer párrafo de este capítulo, pero la contradicción queda descartada cuando notamos que una Causa produce un Efecto y este Efecto se convierte en la Causa de un nuevo Efecto; entonces, cuando el científico realiza la medición de una partícula subatómica y esta emite o absorbe un quantum de energía, ya introdujo una nueva Causa por lo que es natural que el siguiente Efecto sea diferente.

En este punto Usted podría pensar: ¿Y a mí, en qué me beneficia saber esto?

Hay dos razones por los que la Física Cuántica le debería interesar.

Una, fue aplicada para el desarrollo de los transistores, con lo que los tubos de vacío fueron descartados, y a partir de aquí los equipos electrónicos se fueron haciendo cada vez más variados y pequeños.

Dos, al estar demostrado que la naturaleza es determinista las personas ya sabemos que somos los mandantes de nuestro destino.

En el entendimiento y la práctica de este Principio Universal está la clave para ser feliz, es un error creer que “no importa el sufrimiento actual porque en la otra vida seremos felices”; no existe la “otra viva” de la manera que a millones de personas les han hecho creer, esto es un sitio donde iremos después de muertos; pudiendo ser el cielo o el infierno, dependiendo del comportamiento actual.

El determinismo no es fatalismo que nos lleva a vivir una vida infeliz porque alguna vez pecamos, podemos usar a nuestro favor el Principio de Causa y Efecto, creando una Causa que modifique el Efecto de castigo que se esté soportando por culpa de algún error o pecado del pasado.

Pecar es la palabra que se usa comúnmente para describir los actos que son contrarios al amor fraterno o a las leyes fisiológicas.

El Maestro Jesús enseña que la aceptación del error, más el arrepentimiento sincero, es la Causa que elimina el Efecto que debemos soportar por los errores pasados; esto es, que elimina el karma perjudicial, o que perdona los pecados.

Es fundamental que desde este preciso momento use este Principio Universal que permite tener una vida feliz al evitar sufrir por los errores del pasado; pero también es importante que note que el método cristiano para borrar los pecados no le pide que se los cuente a otra persona, ni que se azote, ni que se queme, ni que asesine, entre otras invenciones de ciertos dirigentes religiosos interesados en manipular a las personas.

El 27 de septiembre de 1905 fue publicado el ensayo “¿La inercia de un cuerpo depende de su contenido energético?”, del físico alemán Alberto Einstein, que contaba con 26 años de edad, con el que propuso: Si un cuerpo genera energía en forma de radiación, su masa disminuye en un valor dado por la cantidad de energía radiada dividida para la velocidad de la luz al cuadrado. De esta teoría resulta la ecuación E=MC2  que pone como una igualdad a la materia con la energía.

Sin desmerecer sus múltiples aplicaciones tecnológicas, a la fórmula de Einstein la considero fundamental para la humanidad porque vuelve a juntar a la Ciencia con la Religión, es la prueba científica del Principio Universal de Vibración propuesto por los herméticos y otros grupos religiosos desde hace miles de años, que dice “En el Universo, nada reposa, todo se mueve, todo vibra”.

En 1924 el físico francés Luís De Broglie, a los 32 años de edad, propuso una teoría que dice: Toda partícula (materia) en movimiento lleva asociada una onda (energía); demostró que a medida que la masa de un cuerpo o su velocidad, aumentan, crece su vibración. La propuesta de De Broglie comprobó científicamente la existencia de una sustancia energética íntima e indisolublemente relacionada a la sustancia material.

Esta propuesta es una relación entre Religión y Ciencia porque pone en términos matemáticos un postulado que varias religiones presentaron miles de años antes: La existencia de un campo de energía intrínsecamente relacionada al componente orgánico de las personas, a este campo energético algunas religiones la denominan Alma.

La Teoría de Cuerdas, publicada en 1974 por los físicos Joel Scherk (francés) y John Schwuarz (estadounidense), propone que sólo hay un tipo de partícula fundamental, que no es esférica sino que tiene la forma de una cuerda, y todas las demás substancias microscópicas y macroscópicas son el resultado de los diferentes grados de vibración de las Cuerdas. Esta teoría, en desarrollo, también ratifica el Principio de Vibración.

El 4 de julio del 2012 el Centro Europeo de Física de Partículas (CERN) anunció el descubrimiento del Bosón de Higgs, también conocido como la Partícula de Dios. La existencia de esta partícula subatómica fue propuesta en 1964 de manera separada por el británico Peter Higgs y el belga François Englert, quienes recibieron el premio Nobel de Física el 9 octubre del 2013. A esta partícula subatómica se le atribuye la creación de la masa de las partículas subatómicas, por lo tanto de la materia contenida en el Universo.

La Ciencia y la Religión buscan el entendimiento de una misma realidad, el Universo; por mucho tiempo vivimos confundidos y considerábamos que eran tratados antagónicos, esto sucedió porque unas cuantas personas con intereses egoístas se encargaban de enredar sus postulados.

La tecnología utiliza el trabajo de los verdaderos científicos para crear herramientas que nos hacen la vida más cómoda, pero también hemos desarrollado tecnología para destruir la vida, inclusive de todo el planeta.

La verdadera religión es sencilla, no necesita enredar su doctrina en vericuetos teológicos, ni en pomposa parafernalia, más adelante hablaremos más sobre la verdadera religión. 


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