Somos de barro.

Imagen tomada de http://portalacademico.cch.unam.mx/alumno/historiauniversal1/unidad3/acumulacionOriginaria/acumulacion 

No estoy diciendo que satisfacer las necesidades materiales no es importante; vivimos en un mundo material, nuestro cuerpo está formado de materia, así que los bienes materiales son importantes para alcanzar el Buen Vivir.

El sexo no es sólo para la reproducción, también es una buena manera de eliminar el exceso de energía en el cuerpo, con lo se logra equilibrio y paz; pero, de lo dicho, es consecuencia lógica que el exceso produce desequilibrio energético en el cuerpo lo que se visualiza con enfermedades. La carencia de relaciones sexuales es tan mala como su exceso; este es otro caso en que “lo mismo te cura te puede matar”.

Lo que asevero es que la satisfacción de la necesidad de vivienda, ropa, comida y sexo no debe ser el objetivo de la vida, estos son complementos para tener una vida plena o feliz.

Cuando centramos nuestra vida en satisfacer estas necesidades realmente estamos siendo egoístas con nosotros mismos, después de todo somos seres con una edad que se cuenta en miles de millones de años, y no debemos aceptar que estemos en el mundo sólo para satisfacer las necesidades materiales.

Si seguimos viviendo únicamente para satisfacer estas necesidades, nunca nos sentiremos satisfechos.

Por ejemplo, siempre sucede que cuando llegamos a poseer una vivienda nos sentimos contentos, pero después de un tiempo estamos procurando tener una mejor y dedicamos nuestro esfuerzo de todos los días en cumplir esta necesidad.

Igual nos pasa con la ropa, siempre debemos vestirnos “a la moda” para que seamos bien vistos, esta es otra necesidad que siempre estamos pendientes de satisfacerla. 

NOTA: Para entender completamente este artículo, leer PARECEMOS RATONCITOS